lunes, 12 de noviembre de 2012

COLINAS DEL CAMPO DE MARTIN MORO TOLEDANO

En el valle del río Boeza

y la Sierra de Gistredo
entre aromáticas plantas

encontramos el pequeño pueblo perteneciente al municipio leonés de Igueña, Colinas del Campo de Martín Moro Toledano.
La Ermita del Santo Cristo en lo mas alto del pueblo,
cubiertas de pizarra,
infinidad de fuentes
al lado del hermoso caudal del Boeza.

Piedra y pizarra
hasta la Plaza de la Iglesia con bonita porticada
y tejadillo en la misma espadaña.
Un cielo azul sobre sus estrechas callejuela

con casas con troneras, chimeneas y corredores de madera
aderezadas por colores primaverales

y espesa vegetación.
Su hermoso puente de piedra
se mezcla con su ermita
en un entorno montañoso
coronado por el pico Catoute de 2117 metros de altitud.
Hasta aquí imágenes primaverales. En un segundo viaje y en otoño capte las siguientes estampas de tan bello pueblo.
Nubes en la montaña,
fuentes,

hermosas balconadas
y una gran dedicatoria para este paraje tan bonito.






Molinos a la orilla del río
y sus gentes campechanas, que no dudan "hechar una parlada"
con los forasteros que visitamos estas tierras.

El Potro de Herrar formado por palos de madera
y mas molinos


antes de entrar de lleno
en su maravilloso casco urbano.
















Con el contraste de colores del otoño abandonamos esta maravilla situada a 1200 metros entre las Sierras de Gistredo y los Cilleros en el Valle del Boeza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario